Três

Grabado en diciembre de 2010, este disco es el resultado de una investigación sobre los limites entre lo popular y lo clásico en la música brasileña. Con la iniciativa de Lourenço y la mía en 2006, el trío se formó en 2007 y, después de muchos ensayos, conciertos y festivales, conseguimos hacer un registro muy bueno de ese trabajo. La introducción, que cito a seguir, es de Egberto Gismonti:

“Mi generación creció oyendo de forma activa y participativa la creación y evolución de la formación ‘piano, batería y bajo’, el TRÍO.

¡Lindo!El TRÍO tiene todo lo que hace falta en la creación de cualquier género de música ya hecha o por hacer, ¡una delicia!

Cuando escuché el disco del trio “Três” me acordé de los fundamentos que aprendí con Tamba Trio, Zimbo Trio (que continúa activo), Oscar Petterson Trio, Bill Evans Trio y tantos otros:

1. Dedicación y mucho estudio técnico para tener calidad al tocar el instrumento.
2. Dedicación y mucho estudio armónico para dar calidad al “cuerpo” de cada melodía creada.

3.Dedicación y mucho estudio de la música tradicional de nuestro país para sumar, desarrollar y enriquecer las nuevas células rítmicas, creando nuevas cuestiones, tiempos y acentos.

El trío “Três”, que de redundante sólo tiene el nombre, está en una búsqueda constante en todos los aspectos, revelando que a través de los riesgos de los cambios se abren ventanas que nos permiten observar nuevos puntos de vista sobre un paisaje que ya conocíamos. En su “Choro em 5” tuve la impresión de ver a una pareja acompañada de un “saci pererê” (personaje folclórico de Brasil)… ¿Qué decir de “Choro sambado em 3?” Parece representar los extremos de nuestra cultura mestiza: melancolía y fiesta, choro y samba (géneros musicales brasileños)… En realidad eso seria así de simple si el trío ´´Três¨¨ no hubiese decidido filtrarlo todo y ponerlo en un compás ternario… Los “Três” del trío parece que son 4, 5 o 6. Son composiciones de Francisco y Lourenço, y “Sensível”, canción original de Pixinguinha, al que rinden homenaje, tiene un arreglo cinematográfico, con contrapuntos entre el contrabajo, el vibráfono y el piano. Un arreglo maravilloso. Hasta me pareció ver al trío “Três” haciendo reverencias al dios Pixinguinha, amén.

El repertorio del disco está lleno de propuestas bellas y nuevas, como lo son los componentes del TRÍO:

Francisco Pellegrini: arquitecto en la concepción de arreglos gracias a su buena formación. Usa todo el piano, no deja a ninguna tecla dormir ni descansar, así el instrumento pasa a tener una función y justificación para su existencia. Es un compositor que determina el estilo y la forma de cada composición que hace.

Lise Bastos: conduce con firmeza y discreción cada una de las canciones. Cuando toca la melodía de “Sensível” do Pixinguinha, por suerte, por coincidencia o deseo, el TRÍO acertó más una vez cediendo a quien tiene el derecho, adquirido por ser mujer, de presentar a un dios de la Música Brasileña – Pixinguinha. Esta chica toca muy bonito, sin vicios en las frases, en los glissandos o al marcar el tiempo. Oí el disco imaginándola abrazada al contrabajo, instrumento grande, gordo, bonito y cariñoso, y pensé que Lise lo abraza como abrazamos a nuestras abuelas o bisabuelas, con cuidado, amor, admiración y una dependencia afectiva.

Lourenço Vasconcellos: músico insistente, aguerrido, impaciente, vibrante, arreglador y compositor, amigo y compañero fundamental en esta formación. Benevolente, no se queda marcando el tiempo o el ritmo para los demás – él sabe que los otros saben por dónde está el ritmo, y opta por puntuar y acentuar como un poeta que tiene una inmensa intimidad con las palabras: cada sílaba merece un saludo y afecto. Grande Lourenço.

Los arreglos están hechos a medida para el TRÍO: bien cuidados, bien tocados, y, tan bien ensayados que permiten que la ´´libertad´´ aparezca y rejuvenezca a la música, a los que la tocan y a los que la escuchan.

Entre mis deseos para el trio ´´Três´´, destaco:

1.Que se eleven al mejor nivel, el más cercano al paraíso donde vive la MÚSICA.

2.Que dure mucho tiempo para que nosotros, los que necesitamos la música, podamos renovarnos con sus travesuras melódicas, rítmicas y armónicas.

3.Que mantengan viva la pregunta: si ya hacen esa bella música con sus veinte y pocos años, ¿qué podrán soñar para el futuro?

¡Viva el trío “Três”!

Estoy muy feliz con todo lo que oí y aprendí en este disco. Mando un abrazo para cada uno de los nuevos amigos de la MÚSICA, y les deseo salud, una vida larga y fe – es ELLA la que nos dirige incansable y eternamente hacia la felicidad que necesitamos y transmitiremos a todos.”